RECENSIÓN DEL LIBRO: “EL GOBIERNO DE LAS EMOCIONES” DE VICTORIA CAMPS
La ética o la moral deben entenderse no sólo como la realización de unas cuantas acciones buenas, sino como la formación de un alma sensible. “Aquello que se siente como bueno constituye un deber; quien carece de un alma sensible es incapaz de reconocer deber alguno”. Una persona con carácter o sensibilidad moral reacciona afectivamente…