Reconocidos pensadores de diferentes disciplinas examinan la relación que existe entre el conocimiento científico y las dimensiones más profundas de la vida y de la conciencia humana. Reflexionan sobre el lugar que ocupa la ciencia en el conocimiento humano y en nuestro sistema de valores.
Señalo frases interesantes:
Los estados místicos parecen ser biológicos. Por ejemplo, la fuente de la vida eterna, con todo lo que puede aportar, parece tener algo que ver con la acción del corazón y el bombeo de la sangre.
Tanto místicos como científicos afirman la existencia de una unidad subyacente a la multiplicidad del mundo, el fundamento de la realidad y del ser, o de la conciencia.
La perspectiva de la hipótesis Gaia considera a los organismos y al entorno como un sistema de influencia recíproca y señala la importancia de la simbiosis y de la cooperación como fuerzas complementarias de la competición y a la lucha por la supervivencia.
llya Prigogine junto con otros investigadores han descubierto que el orden puede surgir del caos.
Rupert Sheldrake, su idea esencial de los campos mórficos facilitan que las cosas vuelvan a suceder si ya han ocurrido.
En el nivel más profundo creo que la verdad posee un aspecto transpersonal o impersonal que se reconoce por medio de una facultad interna e intuitiva.
El universo es uno; es nuestra percepción la que lo fragmenta y nos aliena de nuestro sentido intrínseco de pertenencia a él.
El espíritu es la única realidad que se encuentra más allá de la mente y de la naturaleza.
Podemos ver como hermosa la unidad y la complementariedad de las formas de conciencia racional e intuitiva. Todo lo que vemos en un contexto científico es algo limitado y aproximado.
La medicina occidental utiliza un modelo mecanicista newtoniano del cuerpo humano, al que considera como una máquina que puede ser analizada en función de sus partes. Sin tener en cuenta como esta parte es interdependiente con las demás. No se toma en cuenta cómo se relaciona con la función mental y otras funciones psíquicas. No se reconoce la unidad cuerpo-mente.
El conductismo sigue siendo todavía la psicología académica dominante y defiende su enfoque afirmando que es el único “enfoque científico” del estudio de la conducta
La teoría de la psicoterapia se ve muy influida en la separación entre mente y cuerpo. Se separan los problemas psicológicos de los problemas físicos. El psicoanálisis clásico, al igual que la física clásica, se basa en el presupuesto de que el observador, es decir el terapeuta, está separado del fenómeno, es decir del paciente, y no influye en los datos.
El electrón no es ni una partícula ni una onda, es algo que está más allá, pero que en su interacción con el observador manifiesta propiedades de partícula o propiedades de onda.
Hay que tener en cuenta las interrelaciones entre mente, cuerpo y entorno para que tenga lugar una asistencia sanitaria preventiva.
Para tener una ciencia completa no podemos ignorar lo espiritual. La esencia real de la ciencia es la humildad.
La psicología transpersonal es realmente el intento psicológico de empezar a investigar lo espiritual, más allá del conductismo, del psicoanálisis clásico y de la psicología humanista.
Su objetivo es el estudio empírico y científico de los descubrimientos relevantes para el devenir, las amplias metanecesidades de los individuos y la especie, los valores últimos, la conciencia unitiva, la experiencia cumbre, los valores del ser, el éxtasis, la experiencia mística, el sentimiento de sobrecogimiento, el ser, la autorrealización, la esencia, la bienaventuranza, la maravilla, el sentido esencial de la existencia, la trascendencia del yo, el espíritu, la unidad, la existencia cósmica, la amplia sinergia individual y de la especie, el máximo encuentro interpersonal, la sacralización de la vida cotidiana, los fenómenos trascendentes, el sentido cósmico del humor y de la diversión, la toma de conciencia máxima de los sentidos y los campos relacionados con todo ello.